Un estudio documenta una reducción media del 19% para el
colesterol total, del 23% para el colesterol LDL y del 17% para los
triglicéridos.
La levadura roja de arroz, los bulbos de ajo,
la granada o la soja ayudan a reducir el riesgo cardiovascular, tal y como han
mostrado los resultados de un estudio presentado en el IX Congreso Internacional
de Fitoterapia Ciudad de Oviedo, organizado por la Sociedad Española de
Fitoterapia. La conclusión se añade al dato, proporcionado por el Centro de
Investigación sobre Fitoterapia (Infito), que también ha participado en las
jornadas, de que 8 de cada 10 españoles prefieren los preparados farmacéuticos
de origen natural para prevenir trastornos cardiovasculares a los medicamentos
de origen sintético.
De hecho, uno de los preparados que
recientemente ha sido autorizado por la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria
(EFSA, por sus siglas en inglés) para controlar el colesterol es la levadura
roja de arroz. "Es un producto que se obtiene a partir de una levadura que crece
sobre este cereal y cuyos principios activos, la monacolina, la monascina y la
ankaflavina, inhiben la síntesis hepática del colesterol", señala la profesora
de Farmacología de la Universidad Complutense de Madrid, Emilia Carretero.
En concreto, se ha documentado una reducción
media del 19% para el colesterol total, del 23% para el colesterol LDL y del 17%
para los triglicéridos. Asimismo, el libro 'Plantas Medicinales y complementos
de la dieta para la salud cardiovascular', editado por INFITO, en colaboración
con la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA) y la
Fundación Hipercolesterolemia Familiar, ha desvelado también que estos productos
incrementan en un 11% el colesterol HDL.
Del mismo modo, un estudio publicado este mes
en la revista Experimental and Therapeutic Medicine ha desvelado que la
levadura roja de arroz reduce los niveles plasmáticos de colesterol y los
triglicéridos.
En lo que concierne a los bulbos de ajo,
Carretero explica que "interfieren en la síntesis de los triglicéridos y en la
del colesterol, lo que les otorga un papel importante en la prevención y el
tratamiento de la enfermedad cardiovascular". "Además, las semillas de soja
tienen diferentes componentes que han constatado su utilidad para estimular la
formación de bilis y la secreción biliar del colesterol e impedir la elevación
de los niveles de colesterol total, LDL, triglicéridos y ácidos grasos libres",
apostilla.
Actividad antioxidante del
granado
Otro producto natural de dispensación
farmacéutica que ha demostrado su eficacia en la prevención y tratamiento de
enfermedades cardiovasculares es el granado. "Su fruto, la granada, destaca por
su actuación sobre distintos factores de riesgo, principalmente por su capacidad
para disminuir las consecuencias de la oxidación del LDLc como es la
ateroesclerosis", ilustra la profesora de Farmacología de la Universidad
Complutense de Madrid y vicepresidenta de Infito, Teresa Ortega.
No en vano, una investigación publicada este
mes en la revista Plant Foods for Human Nutrition describe cómo el zumo
de la granada en combinación con la uva es capaz de disminuir la oxidación de
lípidos en plasma."Estos productos de origen natural deben ser adquiridos en las
farmacias en forma de preparados farmacéuticos, ya que es en estos
establecimientos sanitarios donde nos aseguran las dosis e indicaciones
correctas y adecuadas a cada caso. Por otro lado, nos ofrecen el consejo del
profesional sanitario mejor formado en plantas medicinales, el farmacéutico", ha
zanjado la experta.