El huevo, la leche, el pescado, las legumbres, algunas
frutas como el melocotón, frutos secos y marisco son, por este orden, los
alimentos que con mayor frecuencia la motivan.
Entre un 2 y un 5% de los niños españoles sufre alguna alergia alimentaria,
según han expuesto los especialistas reunidos en el 62 Congreso Nacional de la
Asociación Española de Pediatría (AEP), que se ha celebrado estos días en
Sevilla.
El doctor Antonio Nieto, vicepresidente segundo de la AEP, ha
explicado en una nota que este porcentaje "crece con el paso del tiempo debido,
entre otras cosas, a la excesiva higiene ambiental, a las menores tasas de
lactancia materna y a los aditivos alimentarios".
Según los datos que
maneja este experto, el huevo, la leche, el pescado, las legumbres, algunas
frutas como el melocotón, frutos secos y marisco son, por este orden, los
alimentos que con mayor frecuencia motivan alergias alimentarias. No obstante,
Nieto precisa que los alimentos responsables "varían con la edad y con los
hábitos dietéticos".
"Es más", arguye, "debe tenerse en cuenta que los
pacientes suelen hacerse alérgicos a los alimentos a los que se ven expuestos.
Así, en los niños de 1 año, la alergia más frecuente es la alergia a la leche de
vaca porque éste es el alimento base de su dieta. Ésta, sin embargo, disminuye
con la edad, lo que refleja el desarrollo de tolerancia a estos
alimentos".
Otras alergias suelen aparecer de forma más tardía. Tales son
los casos de la alergia al pescado o la alergia a los frutos secos, más
frecuente en niños mayores y adolescentes.
De igual forma, la alergia
alimentaria varía en función del país. Según refiere el estudio Alergológica
2005, citado por el Dr. Nieto, "en los países anglosajones son muy frecuentes
las alergias al cacahuete y a los frutos secos, ya que están incorporados a
productos -como es el caso de la mantequilla de cacahuete- muy consumidos
incluso por niños pequeños".
Tratamiento
antialérgico
Hasta hace algunos años, el único tratamiento
disponible para la alergia a alimentos era la dieta de exclusión o evitación
total del alimento. Ahora bien, tal como reconoce el vicepresidente segundo de
la AEP, "una dieta exenta de algunos alimentos (por ejemplo, la leche o el
huevo) conlleva una disminución de la calidad de vida". En la última década se
han implantando terapias activas como la desensibilización o la inmunoterapia
oral.
En el caso de la inmunoterapia oral, la técnica consiste en
administrar cantidades progresivamente crecientes del alimento responsable con
el fin de modular la respuesta inmunitaria para inducir la tolerancia a dichos
productos.
Su utilización depende, según aclara el doctor Nieto, del
grado de severidad de la alergia, de la edad del paciente y de su evolución.
"Dado que existe una proporción significativa de pacientes en los que la alergia
remite espontáneamente, habría casos en los que sería recomendable esperar a que
se produzca la resolución directa del problema. Sin embargo, en los casos más
graves, en los que no es esperable que la alergia desaparezca sola, estaría
indicada la desensibilización oral lo antes posible, ya que en estos casos una
reacción alérgica puede entrañar un grave riesgo para la salud e incluso para la
vida", concluye.